INSPIRACIÓN Y REALIDAD. EL PROYECTO

INSPIRACIÓN Y REALIDAD. EL PROYECTO
La historia viene de muy atrás, como las grandes historias de cada uno. Nos creemos que las historias se forjan en un momento y sin embargo son el fruto de mil momentos de inspiración, conscientes e inconscientes, que duran un segundo pero se instalan para siempre.

La sensación de sostener la vida con mis manos y sonreir mientras me pregunto qué puedo hacer con ella delata mi gran pasión por los proyectos vitales, principalmente aquéllos que contribuyen a algo que tenga que ver con las personas.

Ese revoloteo desordenado sin canalizar ha hecho que a lo largo de los años hayan ido cobrando vida los sueños y hayan irrumpido en mi presente como si siempre hubieran vivido aquí, conmigo.

Mi deseo era montar un hotel con encanto. ¿Acaso no hay lugares en los que el silencio, el olor a piedra, el eco, el agua, el frío o el sol despiertan en uno un algo que está...pero muy adentro? Me pasa en la Alhambra o en un monasterio, también en el mar. Yo quería crear uno de esos espacios en los que las personas vienen a asomarse.

En unas fantásticas vacaciones a Marruecos, decidimos casualmente pasar noche en Tetuán, casualmente también salió a mi paso una casa típica tetuaní que me pareció una maravilla absoluta. Estaba en venta. Preciosa, blanca, con su patio, su jardín, su azotea, su zaguán. Acudió a mi paso y lo desordenó todo cuando ya no la buscaba.

Al cabo de un mes volví, la vi, la paseé, me senté en cada escalón. Para mi tranquilidad me repetí una y otra vez: "¿quizás como inversión sin pensar más allá?". 6 meses más tarde y tras una larga negociación firmaba la escritura y 2 meses después dejaba mi trabajo. ¡Manos a la obra!

miércoles, 11 de abril de 2012

EL GRAN ESCRITOR ENRIQUE PÁEZ EN BLANCO RIAD

A Enrique Páez le gusta disfrazarse. Ésa es la primera frase que Enrique emplea para explicar cómo se ve a sí mismo. Pero como no siempre es carnaval...., dice...los escritores nos escondemos en los libros detrás de los nombres de todos los personajes. En realidad cuando uno escribe se mete dentro de la piel del personaje y puede ser el pirata Patapalo, la abuela Metralleta, la bruja Gertrudis.
Madrileño, habitante en un hogar de familia numerosa ¡diez hermanos! y sin tele...¿será por eso que la imaginación de tantos niños llenaba el escenario de la casa? ¿qué mejor programación?
Entusiasta lector de todo lo que esté escrito y desde siempre, desde Julio Verne hasta los anuncios de pizza o fontaneros a domicilio.
Al terminar la carrera tuvo infinidad de trabajos...y todos le cansaban excepto uno: ESCRIBIR. Y por eso es el oficio que continúa ejerciendo...por suerte nuestra.
Enrique nos cuenta que Abdel es de sus libros el más necesario. Es el único que ha escrito en primera persona y es con el que más se identifica. Enrique se avergüenza de que los españoles tratemos a los inmigrantes como lo hacemos, cuando siempre hemos sido un país de emigrantes. Yo no podía estar más de acuerdo...
Enrique ganó el Premio Lazarillo de creación literaria, desde entonces se dedica sólo a escribir y a dar clases en el Taller de Escritura de Madrid. Qué bonito. Guárdame plaza Enrique que voy para allá! Como dice Enrique..."A escribir se aprende escribiendo; y a vivir, a pensar y a ser libres....leyendo".